En una inversa metamorfosis
volaste de mariposa,
a crisálida.
Si con agua de azahar purifiqué mi pecho
y escondí mi labio para que no pudiera al tuyo unirse,
si con crisantemos vestí la desnuda estancia
y bajo cipreses,
y escondí mi labio para que no pudiera al tuyo unirse,
si con crisantemos vestí la desnuda estancia
y bajo cipreses,
enterré mis ojos marchitos
no vengas tú ahora a mirar debajo de mi falda,
no vengas tú ahora a mirar debajo de mi falda,
no es lícito.