domingo, 25 de abril de 2010

Maneras


Mis palabras nacen de tus versos,
esos que a veces me recitas sin hablar
cuando enredas mi pelo,
cuando embistes mis caderas
o cuando retiras las cortinas y mi vida,
se te cuela dentro.
Mis palabras nacen de tus versos,
esos que a veces me recitas al hablar
sin enmarañarme ni un pelo,
sin habitarme las caderas
o sin retirar las cortinas y tu vida,
se me cuela dentro